El servicio sanitario, tanto el agua potable como los desag眉es cloacales son fundamentales para la salud y se han generalizado como servicio p煤blico obligatorio a partir de epidemias de los siglos XIX y XX.
D铆a a d铆a, los microbi贸logos muestrean el agua de las redes para asegurar su potabilidad, y los l铆quidos cloacales tanto en redes como en plantas depuradoras para preservar el medioambiente y la salud p煤blica.
Con un protocolo de actuaci贸n es posible diagnosticar de manera temprana la evoluci贸n de la enfermedad a trav茅s de los l铆quidos cloacales, tanto en la entrada de las depuradoras (PDLC – Planta Depuradora de L铆quidos Cloacales) como en las redes cloacales de nuestras ciudades.
Ya se conoce que el coronavirus deja un rastro gen茅tico (ARN) que se mantiene en el cuerpo de los infectados durante 20 d铆as. llega a las redes de saneamiento desde el primer d铆a de la infecci贸n, aunque el paciente ni siquiera tenga s铆ntomas o sepa que est谩 infectado, es decir, sea asintom谩tico.
El mundo ya posee la capacidad para la detecci贸n de virus infecciosos en aguas residuales (por ejemplo NoV GI, NoV GII y HAV), y en ese rumbo d铆a a d铆a se explora la metodolog铆a para identificar este tipo de elementos pat贸genos. Es por ello que desde que se desat贸 la pandemia la industria de los servicios sanitarios avanz贸 en realizar an谩lisis cuantitativos de material gen茅tico de SARS-CoV2 en el agua de las redes cloacales, y se ha venido realizando un seguimiento de su evoluci贸n y ajustando los datos como material de trabajo.